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NAVARRA Poemas • brindis por la primera de navarra • cancionero del frente • cantores del norte • ciudadela de iruña • el ebro • el encierrillo • elogio de los vinos navarros • evocacion de pamplona • glorias de navarra • la javierada • la laureada • la laureada (ii) • los espÃrragos • navarra • navarra (ii) • navarra y pamplona • requiem por el monumento • sierra de san donato | Núm. 257 Categoria: NAVARRA CIUDADELA DE IRUñA (Aguafuerte nocturno) VERSO LIBRE La luz crepuscular del mes de enero borda sus hilos de oro en la seda sin brillo del ocaso. Ya declina la tarde y se desmaya llenando de penumbra las palpitantes fauces de la noche, que se acerca reptando lentamente. Un silencio espectante zigzaguea en el aire dormido y el corazón, con un tic-tac de alerta se estremece y escucha en la distancia. AquÃ, en mi vieja Iruña, bordeando los fosos que perfilan su clásico pentágono, está la Ciudadela, el bastión militar que alzó Pamplona. Mole de piedra,cinturón roquero, que estrangula el contorno de la urbe... Roña y verdÃn circundan su recinto, invadido de ortigas y almenado de estrechas cañoneras. En este lento atardecer de Enero todo es quietud y calma. El horizonte subraya la agonÃa del paisaje. -una lÃnea de luz anaranjada- que de pronto se esfuma allá a lo lejos. Transitando la Vuelta del Castillo se adivina, entre sombras, la vieja Ciudadela. Camino hacia sus muros; me acerco al contrafoso y siguiendo un atajo que discurre entre lÃquenes y arbustos, desciendo la escalera por un glacis de rústicos peldaños labrados en la roca y cruzando un carrejo de duros adoquines y dos puentes, antaño levadizos, tras una curva descendente, enfilo su entrada Sur, la Puerta del Socorro, portalón de emergencia, que abotona el complejo de baluartes al ámbito exterior de la muralla. Huye la tarde... Avanzo hasta alcanzar las verdinegras sombras, escrutando a ambos lados la dilatada anchura de sus fosos. Bajo mis pies, la tablazón del puente gime al pisar su viejo maderamen de vigas carcomidas por la humedad y el tiempo.. Penetro en su interior por negro túnel de abovedados arcos y ciegas hornacinas, de puertas laterales con cerrojos y roñosas argollas, garruchas suspendidas de altÃsimas hileras de ladrillos, que abocinan su techo. La cripta y el ambiente sobrecogen, el ánimo se mengua a cada paso y el misterio, la duda y el silencio plastifican mis huellas y pisadas en el barrillo verdinoso y ocre, amasado con polvo de centurias. y el goteo contÃnuo de babeantes gárgolas. << Esta es mi Ciudadela: visión fantasmagórica de horror petrificado. Sólo orin y humedad son tus trofeos. Tu pavoroso entorno suscita el miedo, la inquietud y acorta cada paso que doy en el vacÃo, Avanzo y me detengo vacilante; laberÃntico dédalo de celdas, de frÃos calabozos, de inscripciones borradas, fechas y nombres en ocultos nichos, lista negra de prófugos y apátridas, de espÃas,prisioneros y rehenes, cadena de convictos y encartados, meta final de reos y conjuras, de sediciones y pronunciamientos, de largas bayonetas y fusiles, de sentencias en juicios sumarÃsimos, de plegarias y adioses en la noche, de absoluciones, la rodilla en tierra, de cartas a la madre y a la novia, acuden a mi mente y se entremezclan y mi imaginación hurga entre sueños, entre ficciones y realidades. Brutalidad, poder, dolor, angustia, sangre, acaso inocente, los grises paredones y siluetas tumbadas boca arriba, tras el tiro de gracia;los ojos muy abiertos al pálido claror de las estrellas y al lento amanecer de la mañana.. <<>> . Una potente luz, que brilla de repente disipa mis espectros, mis alucinaciones, me arranca de este trance, de este juego de sombras y acelera mis pasos, penetrando en un vasto escenario con la ciudad al fondo. En el centro, romántica plazuela y allÃ, apuntando al cielo, erguidos en la noche, siete negros cipreses. ¿Pura ficción, certeza o pesadilla? pero en verdad te digo que te siento tal como yo te tengo en mi memoria desde lo más remoto de mi infancia. con centinelas en 'perpetuo cambio, temblando a la intemperie, tiritando de frÃo dentro de las garitas y contestando:¡Alerta, alerta, alerta...! <<<>>> Esta noche he venido a visitarte ya renovada y pulcra, mi vieja Ciudadela, cuando en tus muros se aposenta el Arte, óleos y exposiciones ornan tus calabozos y las mañanas de cualquier domingo, bajo los techos de tu Sala de Armas -atriles musicales y negras partituras- desgrana cadenciosas melodÃas y alegres pasodobles nuestra entrañable banda local, La Pamplonesa <<>>. Hoy vengo a despedirme.Dejo mi amada Iruña, donde tengo mi voz y mis raÃces y las tumbas sagradas de mis muertos. Ya todo queda aquÃ, cabe tus muros, para guardarte siempre en mi memoria y en la luz del recuerdo y la nostalgia, por si ésta fuera la postrera noche que transito tus vÃas fantasmales, hollando tus aceras y adoquines. Adios, adiós, mi vieja Ciudadela. Cuando vuelva otra vez, si Dios lo quiere, que pasten en tus fosos las gacelas, los ciervos, que tu entorno esté lleno de pájaros y niños. Que tus negros cipreses presten marco adecuado a los brotes del Arte, que cuelguen de sus ramas los laureles del triunfo. Sobre tu fino césped que canten los poetas, sintonicen sus himnos pinceles y batutas, rapsodas y escritores. Que emerjan de tus piedras renovadas, mil varoniles ecos de jotas ribereñas y en montañés contraste, los jubilosos txistus silbando sus alegres kalejiras. Que corran los atletas de variopinto atuendo su galopante footing, circunvalando, en deportivo alarde. tus murallas y fosos, los embarrados surcos de tu vecina Vuelta del Castillo. Que de tus calabozos surjan nuevos liceos, de tus negras estancias aulas de paz, deporte y convivencia. Adiós, mi vieja Iruña. No oculto mi tristeza, ni mi melancolÃa... Es ya de noche; tenue shirimiri me va mojando el rostro. No sé si en esta hora es la lluvia o mis lágrimas las que humedecen este adiós que brota del profundo dolor de mi amargura por esta despedida. Porque, a pesar de todo tu pasado, yo quisiera volver, volver a verte y volver a cantarte,mi nueva Ciudadela, la Ciudadela de mi vieja Iruña. ------------------------------------------------- 1 de Mayo de 1979 |
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